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2x02 - Durant, Nebraska
Durant, Nebraska
Temporada 2 » Episodio 02
Emisión original 19 de agosto de 2012
Escrito por John Shiban
Dirigido por Adam Davidson
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"Durant, Nebraska" es el segundo episodio de la segunda temporada de Hell on Wheels y el 12 de toda la serie. Fue emitido originalmente el 19 de agosto de 2012.

Durant debe confrontar una peligrosa amenaza a infierno sobre ruedas. Un horrible crimen en la ciudad móvil acaba llevando a Lily y a Elam a tratar para conseguir justicia.

Introducción[]

En la ciudad de Durant, Nebraska, Eva escucha a los indios gritar desde la distancia y descubre que alguien ha cortado la garganta del telégrafo local. Entonces, corre a esconderse mientras un grupo de guerreros Sioux arrasan con la ciudad prendiendo fuego a los edificios.

Historia[]

En la prisión, un agente le dice a Cullen que es culpable de dos delitos – robo a mano armada y sedición – pero que su sentencia será reducida si revela los nombres de los otros bandidos. Cullen sin embargo se resiste a colaborar, incluso cuando varios hombres le sumergen repetidas veces la cabeza en agua.

El Sueco intercepta un mensaje de telégrafo en el despacho del ferrocarril y despierta a Durant para entregárselo. Durant permite marcharse al Sueco y le dice a Lily, que está en la cama, que los indios han destruido completamente la ciudad de Durant.

Thomas, Joseph y un grupo de hombres armados se suben a un tren para una misión de contraataque. Sin embargo, la locomotora se detiene al acercarse a la ciudad destrozada, los sobrevivientes se acercan a las vías. Toole le dice a Durant que nueve personas fueron asesinadas, y Eva les comenta que los atacantes no eran Cheyenne. Cuando un grupo de indios aparece a lo lejos, Joseph les explica que están enviando un mensaje: "están en guerra con la nación Sioux".

El tren regresa a infierno sobre ruedas con los sobrevivientes de Durant a bordo. Elam y Eva intercambian una mirada cuando ella se baja.

Doc visita a Cullen en la prisión, donde Cullen confiesa que asesinó a un hombre inocente. "Sé que debes sentirte mal por ello, hijo," trata de confortarle Doc. "Ese es el tema, no siento nada," responde Cullen.

Sean negocia con parcelas de terreno y carpas a los sobrevivientes de Durant hasta que Lily aparece acusándole de explotar su miseria, negociando un acuerdo de asentamiento para compensarle por los beneficios perdidos.

En la prisión, los agentes esposan a Cullen, le cubren la cabeza y le arrastran hacia un granero. Al quitarse la capucha, Cullen empieza a golpear la puerta furioso, pero se detiene sorprendido al ver que Durant se encuentra allí, sonriendo.

Mientras se toman un té, Eva le dice a Lily que quiere que se haga justicia respecto al asesino de la prostituta. Lily está de acuerdo con ella, aunque reconoce que es algo difícil de lograr.

En el granero, Thomas le enseña a Cullen dos documentos: una orden para su ejecución y una carta de perdón para impedirla. Durant le comenta que tiene "negocios sin terminar" y le pide que elija la vida o la muerte.

Un agente escolta a Cullen hacia el interior de la locomotora de Durant, donde le esposan a los pies de uno de los asientos. Thomas aprovecha para dar un guantazo a Cullen en la cara por haber robado su ferrocarril.

En la iglesia, Joseph y Ruth distribuyen ropa y alimentos a los residentes de Durant. "Hace falta una tragedia para que se llene la iglesia," señala Joseph. Ruth insiste en que Dios obra de formas misteriosas, pero Joseph le dice que su Dios trabaja demasiado. "Es nuestro Dios," corrige Ruth. El reverendo Cole, borracho, se acerca diciendo que ya está listo para predicar, pero Ruth le pide que se marche y Joseph no le deja pasar.

Elam intenta darle a Eva dinero para ayudar, pero ella rechaza su oferta. "¿Por qué no te lo guardas para uno de tus trajes elegantes?" comenta ella, haciendo que él decida irse.

El reverendo Cole sigue bebiendo alrededor de la hoguera del Sueco. Cole profetiza que el ferrocarril acabará con los indios, pero El Sueco le dice que el legendario espíritu blanco de los Sioux prevalecerá. Le enseña a Cole una señal: un cráneo de animal que encontró en la orilla del río.

Lily se acerca a Elam en la taberna y discretamente le pide que "se encargue" del hombre que asesinó a la prostituta. Elam en principio no quiere hacerlo, pero acaba reconsiderando cuando ella menciona que es Eva la que lo solicitó.

En el tren, Durant y Cullen se preguntan si han hecho la decisión correcta. En cuanto se acerca demasiado, Cullen le rodea la garganta con sus cadenas, desafiando a Durant a pedirle por su propia salvación de una ejecución. Thomas se resiste pero Cullen acaba soltándole. "A veces parece que uno tiene que hacer un trato con el demonio" dice Durant, pasándole su frasco de alcohol. "¿Quién es el demonio en este trato?" pregunta, por su parte, Cullen. Sin decir nada, Durant entrega a Cullen las llaves de sus esposas y se va de la locomotora.

En infierno sobre ruedas, Elam se acerca a Schmidt y le amenaza con su revólver, acusándole de asesinar a la prostituta: "Solo necesito que confieses haberlo hecho para que te dispare." De forma descarada, Schmidt le dice que no puede dispararle ya que eso atraería demasiada atención, y acaba confesando que la asesinó. En cuanto termina de hablar, Elam corre hacia él y le apuñala repetidas veces en el estómago.

Cullen se baja del tren tras Durant, quien le dice que confía en que no se irá de la ciudad. "Si me equivoco, siempre puedo hacer que él vaya a dispararte," continúa Durant, señalando a Elam. Elam se acerca y, como bienvenida, le dice a Cullen que necesitará un arma.

Mientras Cullen camina a través de infierno sobre ruedas, Lily le ve desde el despacho del ferrocarril, así como Sean desde su carpa. Cullen pasa junto al reverendo Cole, quien sigue borracho y ni siquiera le ve. También pasa junto a una multitud de personas que lanzan piedras al cuerpo de Schmidt, que se encuentra colgado y con un cartel en el que se lee "asesino de mujeres." Cullen finalmente llega a su nuevo hogar (mientras Ruth y Joseph observan desde lejos), que es el sitio en el que vivía El Sueco previamente. Cullen abre la puerta trasera y ve al Sueco, quien le sonríe, mira hacia arriba y luego sale andando.

Reparto[]

Actores principales[]

Actores invitados[]

Análisis[]

Enlaces externos[]

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